No he logrado encontrar estadísticas de la edad de quienes vuelan internacionalmente, pero sin duda, que muchos de estos pasajeros deben de pertenecer a la tercera edad, es decir, están libres de muchas responsabilidades del diario vivir como por ejemplo, los hijos, quienes ya terminaron sus carreras y son independientes, quedando el presupuesto libre para realizar esos sueños de juventud, volar a destinos exóticos.

Una buena forma de viajar a costos razonables, están siendo los clubes temáticos, quienes son capaces de organizar un viaje charter y negociar precios con las empresas aéreas y hoteles a cambio de asegurar los pasajeros.

Uno de los viajes más espectaculares para estos nuevos pasajeros, es sin lugar a dudas, llegar a un lugar exótico, sin comunicaciones, aislado del mundo, sin luz artificial, sólo acompañado de un fuego de leña y luz de vela. Poder ver la oscuridad de la noche, observar constelaciones de estrellas sin necesidad de lentes, escuchar el silencio de la noche y oir en silencio el paso el viento, son sensaciones por las cuales hoy se paga y la aviación lo hace posible acercándolos a estos parajes.

En Chile y especificamente en la zona de Magallanes, encontramos a la ciudad de Punta Arenas, Tierra del Fuego, Canal Beagle y Navarino, sin lugar a dudas lugares exóticos que le pueden cambiar la vida, atrévase a cambiar, vuele al confín del mundo.

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