“Aeroamistad”

Written by thomas · Filed Under Aeronautics News 

December 18, 2012

thomas

Sergio Barriga Kreft, Chile

Viviendo una vida que cada día se torna más y más agitada, ya nos hemos acostumbrados a que lo que hoy es noticia importante, mañana tal vez solo sea un recuerdo y en un futuro no lejano, con certeza, parte del olvido.

Es lo que inevitablemente ha sucedido con Steve Fossett, de cuya imprevista partida, en fecha reciente se han cumplido cinco años.

Empresario de éxito, consultor financiero de renombre, avezado navegante, aventurero impenitente, pero sobre todo aviador de corazón.

Su vida estuvo marcada de desafíos que uno a uno supo vencer, como lo fueran, entre otros: el cruce a nado del canal de La Mancha, el primer cruce del océano Pacífico en solitario en globo, la vuelta al mundo sin escalas, también en solitario en el “Spirit of Freedom”, hazaña que repitiera en su jet monomotor “Virgin Atlantic Global Flyer” y el récord de distancia en vuelo sin escalas de 42.469 km.

Vida plena, pero llena de metas aún por alcanzar que él avizoraba en lontananza.

Por ello, cuando en 2007 en el Dayton Convention Center de Ohio fue incorporado a la National Aviation Hall of Fame, sonriendo respondió a tan merecido homenaje: “Espero que no me hayan dado este reconocimiento porque piensen que mi carrera está terminada, ya que no es así”.

Con toda seguridad, en su mente ya anidaba el que sería su próximo desafío, al que diera inicio el 3 de septiembre de ese año, al despegar en su Bellanca Citabria, en un vuelo de exploración sobre la Sierra Nevada, en busca de un lago seco en el cual batir el récord de velocidad terrestre.

Pero en ocasiones el destino depara lamentables sorpresas y desde ese instante se perdió todo rastro de él, comenzando a tejerse la leyenda, situándolo junto a Eduardo Newbery, al teniente Alejandro Bello, a Jean Mermoz, a Amelia Earhart y a otros grandes de la aviación, que un día en forma inesperada se diluyeron en los cielos del mundo.

Solo en octubre de 2008, al encontrarse estrellados los restos del frágil monomotor en las cercanías de Mammoth Lakes, California, se puso término a tantas especulaciones, debiéndose aceptar la cruda realidad.

Los que supimos de su trayectoria y admiramos su valor, confiamos en que las mismas corrientes que pusieron abrupto fin a su postrer vuelo, hayan cogido su alma transportándola hacia los espacios infinitos. Aquéllos que tanto debe haber anhelado conocer.

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